Sin duda alguna, invertir en vivienda es una de las ideas que, tarde o temprano, ronda la mente de muchas personas que tienen algunos ahorros en el banco y quieren sacar una mayor rentabilidad. Más, en un momento en el que se juntan varios factores que incrementan las ventajas de comprar una casa nueva para invertir. Por un lado, los productos financieros no ofrecen una gran rentabilidad, lo que hace que algunos inversores prefieran destinar su dinero a la compra de inmuebles. Por otro lado, la financiación ofrece ahora mismo unos tipo de interés atractivo debido al Euribor en negativo desde febrero, lo que abarata las hipotecas.
Hoy queremos contarte cuáles son las ventajas de invertir en una vivienda de obra nueva.
Aumentas tu patrimonio e ingresos con una inversión no muy arriesgada
El primer beneficio de comprar un piso nuevo es que incrementarás tu patrimonio con un activo que, normalmente, se revalorizará con el paso del tiempo. Es verdad que no debes caer en el error de pensar que la vivienda nunca baja su precio, porque la pasada crisis demostró que puede ocurrir. Pero igual de cierto es que lo habitual es que, en mayor o menor medida, el inmueble aumente su valor con los años.
Por otro lado, y desde el punto de vista de la inversión, el mercado inmobiliario se considera menos arriesgado que otros, como por ejemplo la bolsa. Además, y siempre que esté a precio de mercado, contar con un piso nuevo en alquiler te garantizará un ingreso fijo todos los meses que puede servirte para pagar parte de la hipoteca de ese inmueble (si lo has comprado con un préstamo).
Mayor rentabilidad
Si ya has tomado la decisión de invertir en vivienda tienes dos opciones: comprar un inmueble con la idea de venderlo más adelante cuando se haya revalorizado lo suficiente o comprar la vivienda y alquilarla; esta última es la más empleada por la mayoría de los inversores, ya que desde el primer momento te permitirá recuperar parte del dinero invertido en la nueva propiedad.
Sin duda alguna, una de las principales ventajas de comprar una vivienda para invertir es que la rentabilidad que ofrece el mercado inmobilario está muy por encima de otros productos financieros.
Mucha demanda de pisos de alquiler
Actualmente, en el mercado existe una gran demanda de viviendas de alquiler. Según datos del Ministerio de Fomento, la tasa de personas que viven de alquiler roza el 23,9%, un 3,5% más que en 2011. Traduciendo en viviendas, estos números significan que se han creado más de 700.000 nuevos hogares en alquiler desde 2011.
Sin embargo, la oferta de vivienda en alquiler es insuficiente para la actual demanda. La consecuencia es un aumento creciente del precio de los alquileres en las zonas con más demanda de este tipo de inmuebles (sobre todo las grandes ciudades como Madrid y Barcelona).
Ante esta situación, invertir en una vivienda nueva en una de estas zonas con mayor demanda de alquiler es una excelente opción, ya que rápidamente podrás alquilarla. Más si es un inmueble nuevo, ya que el alquiler de viviendas se concentra sobre todo en los edificios más antiguos.
Los pisos nuevos se alquilan más rápido
Otra de las grandes ventajas de comprar una casa de obra nueva como inversión es que podrás alquilarla más rápidamente que una usada por dos razones. La primera porque, como ya te hemos comentado, que sea nueva supone un valor añadido ante los posibles inquilinos.
El segundo motivo es las viviendas nuevas son aptas para alquilar desde el primer momento. Es decir, a diferencia de lo que suele ocurrir con las de segunda mano, no necesitan de una reforma o lavado de cara antes de ponerse en alquiler. Con un piso a estrenar te ahorrarás esta puesta a punto de la vivienda y además podrás captar a inquilinos dispuestos a pagar un precio superior por disfrutar de un inmueble nuevo.
Casas más equipadas y con más servicios
Las viviendas de obra nueva tienen la ventaja de que se entregan con las cocinas equipadas, con vitrocerámica, horno, microondas e incluso, a veces con lavadora, por lo que está lista para entrar a vivir el inquilino, sin necesidad de invertir en electrodomésticos.
Además, las viviendas nuevas suelen emplazarse en modernas urbanizaciones dotadas con servicios y zonas comunes (piscina, gimnasio, área de juegos infantiles garajes, etc.) que la mayoría de viviendas de segunda mano no ofrecen. Es, sin duda, otro atractivo interesante de cara a captar inquilinos o futuros compradores.
Evitarás reparaciones imprevistas
Todas las promociones de obra nueva están obligadas por ley a tener tres tipos de garantías: de un año para daños materiales por vicios o defectos de ejecución; de tres para los daños materiales causados en el edificio por vicios o defectos de los elementos constructivos o de las instalaciones que ocasionen el incumplimiento de los requisitos de habitabilidad; y de diez para los vicios o defectos que afecten a los elementos estructurales.
Gracias a estas garantías te evitarás sustos y gastos extraordinarios en caso de averías imprevistas, ya que su coste deberá ser cubierto por ellas (salvo que el inquilino sea responsable directo de la avería).
Ahora que ya conoces las principales ventajas que tiene comprar una vivienda nueva como inversión, ten en cuenta que antes de hacerlo es importante que analices bien numerosos aspectos: las características del inmueble, la demanda y precios de diferentes zonas, la rentabilidad del alquiler, los gastos asociados a la compra, etc.
SOURCE: HOUSAGE